La grave situación económica y social luego de tres años de gobierno de Cambiemos se evidencia en una destrucción acelerada presentada como gradualismo, sostenida por un muro de protección mediático y una oposición cómplice representada por gobernadores peronistas, por el PJ colaboracionista y el Frente Renovador de Sergio Massa. El apoyo del establishment financiero internacional y de los gobiernos occidentales más poderosos cuyas economías se benefician con la apertura indiscriminada de la economía argentina, completan el cuadro de situación.