La irrupción en la Argentina de un discurso de retorno a la represión del pobre y del diferente, se reactualiza con la apelación a ominosos silencios argumentativos en la retórica política.
Tres imágenes recientes condensan al macrismo y portan una dimensión simbólica significativa. Las imágenes que podrían titularse sin alarde como Hambre y Represión, Venganza Macrista, y Nazismo Explícito, exponen la muestra del Odio.