En el presente ensayo, el filósofo Alejandro Boverio se pregunta qué significa que el ultraliberalismo se emocione con la posibilidad de que nos pueda gobernar la inteligencia artificial. Se propone pensar a fondo ese anudamiento entre ultraliberalismo e inteligencia artificial a fin de plantear que lejos de pensarlo como una distopía de ciencia ficción, hoy mismo estamos bajo el dominio y, en algún sentido, somos gobernados por lógicas algorítmicas que no elegimos más que superficialmente a partir de plataformas de las que desconocemos su funcionamiento sutil. Que el ultraliberalismo sueñe con que nos gobierne la inteligencia artificial, se articula con la idea de Estado mínimo que tiene en mente: un Estado destinado solamente a proteger la propiedad, y por lo tanto un Estado cuyo alcance solo se restrinja a brindar seguridad y justicia