El Papa Francisco llamó, a través de una carta que envió a la Asociación Argentina de Profesores de Derecho Penal, a contrarrestar la irracionalidad punitiva y a comprender el sufrimiento humano para abordar debidamente los conflictos judiciales. La carta permite confrontar las palabras de Bergoglio con el silencio de buena parte de la dirigencia política argentina, que debería estar preocupada por la vigencia del Estado de Derecho y el respeto a los derechos humanos.