Raúl Zaffaroni escribe este artículo como respuesta a las expresiones vertidas por la presidenta de facto Jeanine Áñez en la Asamblea General de la Organización de Naciones de Unidas, consideradas por la cancillería argentina como una especulación electoralista. Zaffaroni afirma que pocas veces se ha ridiculizado al derecho y a la democracia como en el discurso de Áñez ante la ONU.