Hasta hace poco se difundía la hipótesis de un triunfo de Cambiemos en el 2019 en la primera vuelta. Dicha hipótesis hoy ha caído. No se registra una capitalización de algún opositor debido al alto rechazo, y hay otras figuras aún no instaladas. Como hecho novedoso aparece un leve mejoramiento de la popularidad de la expresidenta. En medio de hechos costosos, el Gobierno cumplió su deseo inconfesable, colocar a los argentinos un piso más abajo.