El “momento Graco” de la antigua Roma es el intento de reformar las instituciones en base a una mayor participación popular. Como la Constitución peronista de 1949 en la Argentina. Pero las leyes de los Gracos sufrieron la misma suerte que nuestra Constitución: fueron borradas por la fuerza, y la oligarquía masacró a los referentes y militantes plebeyos.