Hay una paralelismo, en medio de la actual pandemia del covid-19, entre los grupos anti cuarentena en Argentina y los anti mascarilla en Estados Unidos, ambos oponen libertades individuales afirmando que todos tienen derecho a quedarse o no en sus casas, a usar o no barbijos. Esta actitud anti es ante todo anti política, anti democrática, porque impone una voluntad individual por sobre lo social, y porque la supuesta libertad de decidir no cuidarse es en definitiva la libertad de contagiarse y contagiar a los demás.