El Embajador argentino ante la Organización de Estados Americanos (OEA) Carlos Raimundi, recopila en este artículo las diversas denuncias de Jefes/Jefas de Estado, entre ellas la del presidente argentino Alberto Fernández, en la última Asamblea General de las Naciones Unidas (ONU) respecto del presente orden mundial, para formular una pregunta central: ¿son los mismos organismos financieros que han sostenido el modo de acumulación del capital especulativo transnacional quienes pueden señalarnos el camino de salida?

Por Carlos Raimundi*

(para La Tecl@ Eñe)

Presentación

Nunca antes me había costado tan poco esfuerzo confeccionar un artículo de opinión. Sólo compilé algunos párrafos salientes de 7 intervenciones latinoamericanas en la última Asamblea General de la ONU para formularme y formular a quienes lean esta nota (¿y por qué no a quienes tienen más poder de decisión que yo?), una pregunta central.

Seis de ellas corresponden a Jefes y Jefas de Estado, y una al Canciller de México. Y, si bien pertenecen al campo progresista, no estamos ante una homogeneidad o coordinación política como la que hubo durante los primeros tres lustros de este siglo. Sin embargo, todas ellas tuvieron un tono de denuncia, en plena disconformidad con el momento presente.

La injusticia, la desigualdad, la responsabilidad del Norte global en el cambio climático y sus fallas en el combate frente al narcotráfico, así como el reclamo de soberanía en el manejo de los recursos naturales y la condena a los bloqueos fueron parte de los ejes principales del cuestionamiento de las bases mismas del sistema imperante.

Denuncia y cuestionamiento

Luis Arce, el Presidente de Bolivia, denunció la “crisis múltiple y sistemática del capitalismo que pone cada vez más en riesgo la vida de la Humanidad y del planeta”, el “deterioro creciente del sistema multilateral” y el “alto costo humano y material de las pérdidas y daños reales causados por siglos de mal desarrollo capitalista”. Abogó por el “final del mundo unipolar que prioriza la reproducción del capital antes que la reproducción de la vida”.

“Lamentamos que mientras los países del capitalismo central apuestan con grandes sumas de dinero por la guerra, se hacen ínfimos aportes para el desarrollo integral y sostenible y para la erradicación de la pobreza. En los últimos meses se han dedicado al conflicto bélico de Europa 20 veces más que lo comprometido al fondo verde del clima en una década”.

“La crisis climática requiere armonía entre los seres humanos y la naturaleza, y no usura”. “Los principales responsables de la emisión de gases de efecto invernadero ahora piden que cada país persiga la ilusión de una descarbonización al 2050, sin tomar en cuenta sus responsabilidades históricas. Tal vez los deudores climáticos históricos quisieran que todos nos preocupemos sólo del futuro, para no discutir sus promesas incumplidas”.

 “Queremos que nuestras reservas de litio no sigan el camino de otros recursos naturales que, en las condiciones de colonialismo y capitalismo, sólo sirvieron para aumentar la riqueza de unos cuantos y provocar el hambre de los pueblos. Ratificamos la soberanía sobre nuestros recursos naturales como el litio, su industrialización, el beneficio hacia el bienestar de los pueblos, no de trasnacionales. Rechazamos todo tipo de injerencia y desestabilización de la democracia en nuestro país, con el afán de controlar el litio. Naciones Unidas debe tomar medidas contra todos aquellos que no respetan la soberanía y la no injerencia. No somos fichas de tableros de ajedrez, somos pueblos que trabajan día a día para salir adelante y tenemos todo el derecho de decidir sobre nuestros recursos naturales”.

“Hay que cambiar de enfoque en el abordaje de la lucha contra el narcotráfico. Seguir haciendo énfasis en la oferta y no en la demanda sólo ha servido como pretexto para la militarización. Es el momento de trabajar juntos con Perú y Colombia y otros países afectados por ser tránsito de drogas, en la regionalización de la lucha contra el narcotráfico bajo un enfoque integral menos militarizado y más social. Naciones Unidas debe evaluar sus resultados no sólo a los países del Sur sino a los del Norte, del que uno de sus integrantes certifica unilateralmente el combate a las drogas. La guerra contra las drogas, principalmente aquella desatada por EEUU, ha fracasado”.

“Es inconcebible que se apliquen medidas coercitivas unilaterales con el objeto de doblegar gobiernos a costa del hambre y el sufrimiento de sus pueblos. Ningún país debería ser sancionado o acorralado por ejercer su derecho a determinar libremente su propio sistema político, económico y social. Es inhumano y criminal el bloqueo comercial y financiero contra Cuba. Es un crimen contra la humanidad mantener este tipo de medidas y de paso incorporar a ese país a la lista de los países patrocinadores del terrorismo. Además, debería reflexionar de cómo las decisiones mayoritariamente tomadas cada año en esta Asamblea son incumplidas”.

Gustavo Petro, Presidente de Colombia, señaló que “a ustedes mi país no les interesa sino para arrojarle venenos a sus selvas, llevarse a sus hombres a la cárcel y arrojar a sus mujeres a la exclusión. No les interesa la educación del niño, sino matarle su selva y extraer el carbón y el petróleo de sus entrañas. Mientras hipócritas persiguen las plantas con venenos para ocultar los desastres de su propia sociedad, nos piden más y más carbón, más y más petróleo para calmar la otra adicción: la del consumo, la del poder, la del dinero. Estas son las cosas del poder mundial de la irracionalidad. Según el poder irracional del mundo la culpa no es del mercado, sino de la selva y de quienes la habitan”.

“La enfermedad de la soledad no se curará con el glifosato. No es la selva la culpable. La culpable es su sociedad educada en el consumo sin fin, en la confusión estúpida entre consumo y felicidad que permite, eso sí, que los bolsillos del poder se llenen de dinero. Si no corregimos el rumbo, Estados Unidos verá morir por sobredosis a 2.800.000 jóvenes por fentanilo, verá millones de afros norteamericanos ser apresados en sus cárceles privadas, verán morir el sueño de la democracia tanto en mi América como en la América anglosajona”.

“La guerra contra las drogas ha fracasado. La lucha contra la crisis climática ha fracasado. Disminuir el consumo de drogas no necesita guerras, necesita que todos construyamos una sociedad más solidaria, más afectuosa. ¿Quieren menos drogas? Piensen en menos ganancias y en más amores. Se inventaron una guerra y otra. Invadieron Ucrania, pero también Irák y Libia y Siria. Invadieron en nombre del petróleo y del gas. ¿Para qué sirve la OTAN y los imperios?”.

“Si observan que los pueblos se llenan de hambre y sed y emigran por millones hacia el norte, ustedes los encierran, construyen muros, les disparan, los expulsan como si no fueran seres humanos. Arrodillando la racionalidad humana a la codicia”.   

Para Marcelo Ebrard, Canciller de México, “el Consejo de Seguridad de la ONU no ha conseguido prevenir la guerra ni un alto en la agresión armada, menos aún encaminar proceso diplomático alguno”. “Las armas nucleares siguen representando la principal amenaza para la supervivencia de la Humanidad”.

 Gabriel Boric, Presidente de Chile, dijo que “Chile es un país con tremendas oportunidades, con cobre, litio e hidrógeno verde, y estamos trabajando para que sea para todos y no para unos pocos”.

“Vivimos en una época de profundas incertidumbres y sobresaltos. Nuestro país es responsable de una parte mínima (el 0,24%) de las emisiones globales de gases de efecto invernadero, mientras las economías más grandes del G20 producen el 80%”.

“Hace casi tres años debimos hacer frente a una grave crisis política y social, pues una gran mayoría de chilenos y chilenas manifestó su malestar frente a la desigualdad y los abusos, su indignación frente a las largas esperas para recibir atención en la salud pública, su hastío frente a las millonarias deudas por estudiar, su rechazo a las pensiones de miseria después de largos años de trabajo, llevándonos a ser uno de los países más desiguales del mundo”.

Según Pedro Castillo, Presidente de Perú, “la situación económica internacional se torna crítica”, por “el deterioro en el nivel de vida de las mayorías pobres y extremadamente pobres”. “Los indicadores del crecimiento global no son alentadores, América Latina está sufriendo la pobreza y la pobreza extrema”. “Las metas de desarrollo sostenible están gravemente comprometidas”.

Xiomara Castro, Presidenta de Honduras, expresó que representa “el primer gobierno electo democráticamente en 13 años. Pero la democracia electoral no es suficiente para garantizar el bienestar material y espiritual de nuestro pueblo”.

“Cinco de cada diez de mis compatriotas vive en pobreza extrema, pero eso no impresiona a la dictadura monetaria, que impone medidas draconianas de disciplina fiscal que aumentan el sufrimiento de las mayorías, mientras el capital especulativo no tiene límites”.

“Debemos rechazar esa austeridad que premia a los que concentran la riqueza en pocas manos mientras aumenta la pobreza en forma exponencial”.

Denunció la “descarada actitud antidemocrática, algunas veces disfrazada de diplomacia. Las naciones pobres del mundo ya no soportamos los golpes de estado, el lawfare ni revoluciones de colores usualmente organizadas para expoliar nuestros vastos recursos naturales”.

“Las naciones industrializadas del mundo son las responsables por el grave deterioro del ambiente, pero nos hacen pagar a nosotros por su oneroso estilo de vida”.

“La Honduras que dirijo se está construyendo bajo una mirada de refundación humanista, impregnada de dignidad y soberanía, que hará lo que legalmente sea importante para nuestro bien común. Nos resulta inaceptable este orden mundial. No sigan tratando de desestabilizar a Honduras y dictarnos sus medidas o escoger con quiénes debemos relacionarnos”.

“Nunca más cargaremos con el estereotipo de que somos una república bananera. Terminaremos con los monopolios y los  oligopolios que sólo nos empobrecen. Honduras sólo tendrá futuro si da pasos en firme para el desmontaje de la dictadura neoliberal”.

Propuso terminar con el colonialismo, construir un modelo económico alternativo profundamente soberano, que incluye la desprivatización progresiva de los servicios públicos.

“Pregonamos el retorno al respeto por la autodeterminación de los pueblos, rechazando el infame y brutal bloqueo al pueblo de Cuba y la agresión contra Venezuela. Es tiempo de discutir seriamente la multipolaridad del mundo”.

Para nuestro Presidente, Alberto Fernández, “esta Asamblea General es quien debe ver a tiempo las señales de alerta que hay en el planeta. La pandemia trasparentó las enormes desigualdades que soporta la población mundial. ¿Es justo que la fortuna de sólo diez hombres represente más que los ingresos del 40% de la población mundial? ¿Es ético que la pandemia se haya cobrado cuatro veces más vidas en los países más pobres que en los ricos? No denunciar este modelo de acumulación que concentra el ingreso en pocos mientras millones quedan sumergidos en la pobreza, puede volvernos cómplicas en la consolidación de tanta adesigualdad”.

Y también sostuvo que “no todos somos igualmente responsables de la crisis climática. Las responsabilidades deben ser diferenciadas y ello exige aliviar el esfuerzo de los que no fuimos culpables.”

“Argentina se suma al reclamo de los pueblos de Cuba y Venezuela para que se levanten los bloqueos que esas naciones padecen.”

“El Reino Unido debe acatar el llamado de la comunidad internacional y poner fin a la anacrónica situación colonial de las Islas Malvinas, Georgias, Sandwich del Sur y sus mares circundantes.”

“Debemos implementar acuerdos globales que erradiquen el hambre y reduzcan de modo drástico las desigualdades. La humanidad está en riesgo.”

Pregunta final

El sistema denunciado nos ha conducido a tres grandes cataclismos: la inaudita concentración de la riqueza, el desastre ambiental y la cercanía de un conflicto nuclear.

Tengamos en cuenta que quienes lo sustentan son los grandes conglomerados financieros, laboratorios y otros monopolios, sostenidos, a su vez, por fondos de inversión y reproducción de derivados cuyo volumen de negocios es varias veces superior al presupuesto de los Estados mencionados, y atenta claramente contra su soberanía para la toma de decisiones.

Y, a su vez, estos fondos constituyen la plataforma financiera de los organismos multilaterales que, con sus fórmulas de ajuste, acentúan nuestra dependencia.

El cuestionamiento en la ONU fue contundente. Ahora bien, la pregunta es: ¿tiene sentido seguir creyendo que los mismos organismos financieros internacionales que constituyen el andamiaje del sistema cuestionado, son quienes nos pueden indicar el camino de la solución? ¿Tiene sentido seguir acudiendo a ellos para que nos reiteren las mismas pautas que nos condujeron al desastre? ¿No será el momento de unirnos en torno a un nuevo paradigma organizador de nuestros intereses comunes y ponerlo en marcha de inmediato?

El deterioro del modo de acumulación del capital financiero trasnacional es inexorable. Pero el sufrimiento que trae aparejado para nuestros pueblos no puede esperar a su decantación natural. Tratándose de gobiernos populares de la región, la decisión y la acción política tienen que intervenir sin más demoras.

Washington, D.C, Estados Unidos, 30 de septiembre de 2022.

*Embajador argentino ante la Organización de Estados Americanos (OEA).