Carlos Caramello afirma que existe una progresía sentimental y coqueta que simula abrazar las consignas más profundas de la doctrina peronista pero, en realidad, lo que hace es amortiguar el golpe que le provoca al Poder tropezar otra vez con la piedra populista. Son los progre-peronistas, la nueva herramienta imperial para instalar aquel formato de dos partidos de derecha a los que Juan Perón hizo referencia.
Por Carlos Caramello*
(para La Tecl@ Eñe)
Para quienes ambicionan el poder,
no existe una vía media
entre la cumbre y el precipicio.
Tácito
No es la economía, ¡estúpido!. NO. Es el Poder. Y no especialmente el Económico -que mal que mal, aún en un capitalismo frenético, de producir se trata-. Es el Financiero, o mejor dicho el Anarco-Financiero. Y el Judicial. Y sobre todo el Mediático.
El Poder con mayúsculas. Ese que, cuando en las democracias modernas un presidente llega al gobierno a través del voto popular, viene rápidamente a aclararle que si no negocia con ellos, nunca tendrá poder.
Eso está claro. Uno lo ve cuando abre un poquito los ojos y advierte cómo los que consiguen ese poder que el Pueblo otorga, ni bien se sientan en el sillón que nunca usó Rivadavia, corren a que el otro poder, el de las corporaciones y las embajadas… y los servicios de inteligencia transnacionales, los bendiga.
Por eso el problema es el Peronismo. Porque todavía hay un grupo muy importante de argentinos -aunque después de cada decepción se achica un poco, uno debe reconocerlo- que todavía sueña, vive y lucha para que el mayor poder sea, de verdad, el que otorga el voto popular. Si no, ¿de qué va esto de creer que se vive en democracia pero, en realidad, se vive en cualquier otra cosa?
Ya lo advirtió hace años Juan Perón. “Los norteamericanos, dignos hijos de la Gran Bretaña, han organizado dos partidos de derecha que les permite mantener su sistema plutocrático y sostener teóricamente una simulación democrática para engañar a los tontos que tanto abundan en la política o estimular a los sinvergüenzas, que también abundan”. Ese sistema que les ha funcionado hasta estos días -aunque el “loco” de Trump lo puso en jaque mandando a asaltar el Capitolio- viene siendo exportado hacia los países periféricos con bastante éxito. Pero por estos pagos, de manera casi aristotélica, siempre vuelve a tropezar con la piedra del Peronismo.
El golpe, no obstante, es cada vez más leve. Hay una progresía sentimental y coqueta que simula abrazar las consignas más profundas de la doctrina peronista pero, en realidad, lo que hace es amortiguar el golpe que le provoca al Poder tropezar otra vez con la piedra populista. Un semi-peronismo rubio, perfumado, profesional, cuasi académico, moderado, negociador y lábil que prefiere la aprobación del Poder Fáctico antes que la satisfacción del Popular.
Son los que vienen a ayudar a instalar los “dos partidos de derecha” necesarios (aunque los disfracen de centro-derecha y centro-izquierda) para que nuestra democracia mude a plutocracia. Son el progre-nismo, o el pero-sismo o similar. Una suerte de neopopulismo-vegui que mira por sobre el hombro a los negritos (no importa cual sea la tonalidad epidérmica) viscerales, confrontativos, malhablados y anacrónicos y, poniéndose un dedito en la boca, los manda a callar bajo amenaza de denunciar por las redes y los medios, que trabajan “para que vuelva la derecha” (jé).
Ellos, los progre-peronistas, son la nueva herramienta imperial para instalar aquel formato de dos partidos de derecha a los que Juan Perón hacía referencia.
Son ellos los que vienen a adormecer conciencias con las caricias de un país desagrietado, en el que ya no habría lugar para los nostálgicos ni los furiosos, ni los que reclaman por sus derechos.
Porque el Poder les ha explicado, con toda claridad, que es con todos, menos con… esos.
Buenos Aires, 3 de febrero de 2021.
*Licenciado en Letras, escritor y autor junto a Aníbal Fernández de los libros “Zonceras argentinas al sol” y “Zonceras argentinas y otras yerbas”, y “Los profetas del odio”. Su último libro editado es “Zonceras del Cambio, o delicias del medio pelo argentino”.
3 Comments
Que lindo Carlos , excelente, que bueno recordar que Perón ya nos había dejado respuestas para todo, para que se nos haga más fácil el camino, somos duros y desmemoriados, abrazo enorme!!.
Todo muy lindo, pero, ..que pasa con la deuda?, con la fuga, ya tienen 500.000 millones de dólares en offshore, 86.000 millones éstos 4 años, ahora Macri los quiere poner en una fundación, al estilo EL PADRINO III, vea la pelicula, es una copia. Hasta se pelean los de jxc para pertenecer y participar. Tampoco se investiga más, IMPUNIDAD, Edenor fue parte del negociado? Por IMPUNIDAD?. El pueblo quiere saber de que se trata.
El articulo describe perfectamente el VACIAMIENTO que sufrió doctrinariamente el «peronismo» desde el 24/3/1976, que luego se potenció con los «Herminios Iglesias» (sinmigo o conmigo), los cafieros (ahora los nietitos en el gobierno), los Luder colaborasionista del gobierno de facto, los Menem, y sucesivamente en una suerte de «SOCIALDEMOCRACIA» europea. Son los vencedores de la «juventud maravillosa» que suplantó a la resistencia peronista por un idiario socilaista populista, que comulgan con el establimimenth financiero. De ahi que la Ley de Entidades Financieras 21.526 sigue indemne desde Enero de 1977, habiéndose desmontado el Estado de Bienestar. Se llaman peronistas (a pesar que falleció el 1 de julio de 1974) porque se ponenen la camisera de éste al saber que el PUEBLO ES y SERÁ JUSTICIALISTA, a pesar de los gorditos de la CGT y demás. De esto se desprende lo simple: «VIVIR PAGANDO Y MORIR DEBIENDO» (Alejandro Olmos) con un solo destino: la SECESION TERRITORIAL del país, en zonas bien delimitadas y que las leyes fraudulentas lo permitiran: la Constitución Nacional ilegítima de 1991.arts. 124/125, el Codigo Civil y Comercial con la modificación de los Actos de Comercio por una figura internacionalista de oferta y aceptación, con el Derecho Real de Superficie, con la una Capital Federal venida a «Ciudad Autónoma» en haberles ya delegado recursos federal para su propio sostenimiento, las Provincias con un incorrecto presupuesto jurídico de ser «prexistente a la Nación» donde entregan el patrimonio nacional y federal a su antohjo a empresas internacionales. Eso fue un PLAN y como tal lo que el articulo describe, es un síntoma del deterioro. Como la entrega a los británico en 1810, hoy se repite nuevamente: «EL PUEBLO QUIERE SABER DE QUE SE TRATA». Muy buen articulo, pero llegó tarde.