El periodista Hugo Presman afirma en esta nota que la crisis de la Argentina supera largamente a las alternativas existentes en el 2022, y sostiene que ahí está el meollo del descrédito en que está sumida la política. Es por eso que el pesimismo, escribe Presman, está lleno de incertidumbre.
Por Hugo Presman*
(para La Tecl@ Eñe)
El polifacético ensayista francés Jean Paul Sartre sostenía: “No quiero morir en el desencanto, pero hay que tener fundamento para la esperanza”. Argentina vive una crisis de características muy particulares: crecimiento del PBI de 10,4% en el 2021, recuperando la caída del 2020 y 6% hasta agosto del 2022, con posibilidades que el año cierre con un crecimiento del 3 al 4%. Baja desocupación, actividad importante en muchas provincias, pero caída espectacular de la participación de los trabajadores en el ingreso nacional: de 51,8% al finalizar el gobierno de Cristina Fernández al 46,1% al terminar el gobierno de Mauricio Macri. Se recuperó hasta la pandemia a un 48% y ha descendido al 43,1% en el gobierno de Alberto Fernández.
Los balances en la Bolsa de Valores engordan sus cuadros de resultados; y empresas como Arcor y Molinos registran utilidades cinco veces superiores a sus registros medios históricos. Años atrás Cristina Fernández había alertado que la recuperación económica no se la llevaran cinco vivos.
Se da la novedosa circunstancia que un trabajador formalizado esté por debajo de la línea de la pobreza. Que ésta sube y baja algún punto pero se incrementa la indigencia. Los restaurantes están llenos en CABA y sus hoteles no tienen plazas disponibles, mientras aumenta la cantidad de gente que acude a los comedores en Capital y la Provincia de Buenos Aires, sin que quede afuera ninguna zona del país. Una sociedad con una matriz desigual cuya exhibición impúdica se ha entronizado.
Otros números macroeconómicos son muy deficitarios, como las reservas escasas en el BCRA después de haber despilfarrado dos años de superávit comercial que consumieron el 60% de ellas. Este despilfarro es el resultado de haber autorizado el pago de las deudas privadas contraídas en el endeudamiento generalizado que impulsó el macrismo. Será un punto negrísimo del gobierno de Alberto Fernandez, a lo que se suma un endeudamiento descomunal en pesos de 9 billones de pesos con pronóstico más que reservado en su cumplimiento; ocho veces más que la que dejó Macri. Haber pateado hacia adelante la deuda externa con una mejor programación, que la increíble dejada por el mejor equipo de los últimos 50 años que obligaba a pagar 37.000 mil millones de dólares entre los años 2022 y 2023, está lejos de solucionar el problema porque la suma de las refinanciaciones con el Fondo Monetario Internacional, acreedores privados y Club de Paris, a partir del 2025 resulta a todas luces impagable. Según el periodista Julián Blejmar, en una nota publicada en el sitio El Destape del mes del 18 de octubre del 2022, ya para el 2025 los vencimientos suman 14,430 millones de dólares y que a partir del 2027 superan los 20.000 millones de dólares.
En términos generales el gobierno del Frente de Todos administró adecuadamente la pandemia, reconstruyó el sistema sanitario, consiguió las vacunas imprescindibles en momentos dramáticos, y sostuvo la economía en momentos que no se avizoraba el futuro. Pero superados los momentos dramáticos del 2020 con la recidiva del 2021, el gobierno no afectó ningún interés económico. La Argentina necesitaba pasar a la ofensiva pero Alberto Fernández sólo conocía, futbolísticamente hablando, defender su propio arco y hasta en eso manifestó una constante vacilación y fue entregando uno a uno a sus defensores.
La vicepresidente y socia mayoritaria que diagramó la exitosa estrategia para derrotar al macrismo, en el convencimiento que ella no podía agrupar la coalición necesaria para terminar con la experiencia neoliberal, eligió a un moderado articulador político para conseguir primero un frente amplio y luego la posibilidad de convivencia con el establishment y negociación con el Fondo. Lo cierto es que Alberto Fernández no logró el apoyo del poder económico y tampoco afectó intereses. Se avanzó así directamente hacia el precipicio con permanentes alertas de Cristina Fernández que cumplió el papel oxímoron de ser vicepresidenta, tener a su gente en importantes lugares del poder (ANSES, PAMI, YPF, AEROLÍNEAS, el área de energía hasta el ascenso de Massa, dos ministros y la gobernación de la provincia de Buenos Aires) y al mismo tiempo adoptar un posicionamiento crítico de su propio gobierno, ante diferencias políticas y personales con el Presidente. Sus misiles fueron desarmando el gabinete original del presidente, que defendía a los suyos hasta que les fue soltando la mano.
Entre la constante procrastinación del Presidente y el loteo de los ministerios, la inoperancia se apoderó de la gestión y el rumbo se volvió desconcertante. Un ejemplo de los cientos que lo ponen de manifiesto: El Ministerio de Desarrollo Social a cargo de Victoria Tolosa Paz que responde a Alberto Fernández. Debajo de ella está Laura Alonso de la Cámpora y su segunda es Micaela Ferraro alineada con Malena Galmarini. El jefe de Gabinete es Gustavo Aguilera que responde a Juan Zabaleta y descendiendo en la estructura está la gente del Movimiento Evita de Emilio Pérsico.
Al avance de la crisis de la macroeconomía se superpuso la crisis política permanente que en julio llevó a las dudas sobre la continuidad del gobierno. Si la conformación original del Frente estuvo dada, en una simplificación, por una centro izquierda representada por Cristina Fernández, un centro por Alberto Fernández y una derecha por Sergio Massa, el desemboque desesperado fue el desplazamiento de Alberto a una presidencia protocolar pero con la posesión de la lapicera, y un ejecutivo real desde un superministro como Sergio Massa dispuesto a hacer potenciado lo que se le objetaba a Martín Guzmán, ahora con el apoyo implícito y a veces explícito de Cristina Fernández. Supervisado por el Fondo, imposibilitado de mediar en la puja distributiva que desbalancea groseramente los tantos hacia el sector capital, el Frente de Todos avanza por un estrecho desfiladero con el objetivo de máxima en primera instancia y de mínima en segunda de llegar a las elecciones del 2023. Un objetivo pequeñísimo para las expectativas que se tenían en el 2019, cuando Alberto Fernández decía al asumir en Plaza de Mayo: “Cuando mi mandato concluya la democracia argentina estará cumpliendo cuarenta años de vigencia ininterrumpida. Ese día quisiéramos que podamos demostrar que Alfonsín tenía razón cuando decía que con la democracia se cura, se educa y se come. Pongámonos de pie y empecemos nuevamente nuestra marcha”.
LA OPOSICIÓN CEBADA
La presencia de Javier Milei desestabilizó al PRO, al tiempo que lo desnudó. El verdadero Macri, (no el maquillado por Jaime Durán Barba y Marcos Peña) apareció descarnadamente. Sus declaraciones son brutales y encuentra en Patricia Bullrich una heredera potenciada. Desde la privatización de todo lo que puede ser privatizado en el Estado, empezando por Aerolíneas, al parámetro de la rentabilidad para todo lo que sea público, y eficiente o condenado a cerrar en lo privado. Desde la vuelta a las AFJP, que no saben cómo sacársela de encima en Chile donde nacieron, a que el Estado no se encargue de la salud según dejó exteriorizado implícitamente en su segundo libro escrito en su nombre por el impresentable de Pablo Avelluto, cuyo golpe preferido fue el del 16 de septiembre de 1955, que desde lo nacional y popular se la califica de Revolución Fusiladora. A su vez Gerardo Millman, la mano derecha de la Presidente del Pro, alguien con una extraña capacidad de Nostradamus para prever el intento de magnicidio de la vicepresidenta y con una propensión a rodearse de asesoras con notables características físicas y dudosas probidades, afirmó «No atendería a nadie el PAMI. Yo lo cierro. Mi obra social es quien me tiene que bancar. Pongo la plata todo el año para que cuando estoy enfermo me atienda» La ex Montonera promete terminar con los sindicalistas, mientras el PRO en su conjunto va por adelgazar hasta la anorexia a la legislación laboral. Prometen despejar calles y rutas de piquetes, abrir la economía hasta el exterminio de la industria, e implícitamente alinear las jubilaciones a las exigencias del Fondo Monetario. Para concretar “la solución final” que intentaron y en buena parte lograron la dictadura establishment-militar y el menemismo, necesitan reformular el papel de las fuerzas armadas y darles zona liberada a las fuerzas de seguridad.
El ingenio popular lo recogió el historiador Felipe Pigna, que transcribió un grafiti que observó en una de las paredes de la ciudad donde gobierna el PRO desde hace 16 años: “Las medidas de Macri son 55,76 y 90”. Y otra del propio historiador: “La figura del desaparecido preanuncia la del desocupado”
Se puede observar un Mauricio Macri muy activo, mucho más que cuando era presidente, que revela su deseo de postularse nuevamente a la presidencia. En el horizonte se visualiza un conflicto con la Presidenta del PRO, que cree que a los 66 años ha llegado su hora respaldada por su crecimiento en las encuestas, mientras que Horacio Rodriguez Larreta aparece empalidecido por la halconización política, mientras la interna transita carriles brutales.
EL IMPERIO PROCUPADO Y BRUTAL
Laura Richardson, la jefa del Comando Sur de los EE.UU declaró: “Esta región es tan rica en recursos, es una riqueza fuera de serie. Y tienen mucho de que enorgullecerse. Nuestros competidores y adversarios también lo saben, lo rica y los recursos de esta región. El 60% del litio del mundo están en esta región. Tienen crudo pesado, tienen crudo dulce ligero, tienen elementos de tierras raras. Tienen el Amazonas que se llama el pulmón del mundo. Tienen el 31% del agua dulce del mundo, aquí en esta región. Y hay adversarios que se aprovechan de esta región todos los días, justo en nuestra vecindad. Yo solo veo lo que ocurre en esta región en términos de seguridad. Son la seguridad, nuestra seguridad nacional en las patrias y en los EE.UU.”
EL FMI SE DESNUDA
El periodista Alejandro Bercovich en su columna semanal en el diario BAE (Buenos Aires Económico) del 20-10-2022 escribió bajo el título “El Estado no es nadie”: … “La búlgara (Kristalina Georgieva) avisó que se había terminado la paciencia del directorio frente a la «contabilidad creativa» de la era Guzmán. Y fue brutalmente honesta al detallar la profundidad que para el FMI debe tener la reforma jubilatoria, que volvió a exigir (por ahora sin plazos) en la página 70 del Staff Report publicado el 7 de octubre.
—Las jubilaciones tienen que ser para los más vulnerables —le dijo a Batakis en aquella cita el 25 de julio.
—Bueno, a nosotros eso nos parece bien -respondió la entonces ministra.
—Ah, qué bueno que estemos de acuerdo en algo tan importante.
—Espere, ¿usted dice solamente para los más vulnerables?
—Sí.
—Claro, eso es otra cosa y vamos a tener que seguir conversándolo -tragó saliva su interlocutora.
El presente diálogo fue confirmado por el economista Horacio Rovelli en el programa EL TREN, del 3-11-2022 ante una pregunta formulada por el autor de esta nota, quien la recibió directamente de la ex Ministra de Economía Silvina Batakis.
LA ULTRADERECHA CON UN PISO ALTO
Javier Milei, que goza de la simpatía de Mauricio Macri y Patricia Bullrich, apoya a la ultraderechista VOX española, a Jair Bolsonaro en Brasil, al derechista Rodolfo Hernández en Colombia, a José Antonio Kast (que reivindica a Pinochetismo) en Chile. Aquí fue asesor del asesino, ex gobernador de Tucumán, Domingo Bussi y hace alianza con su hijo Ricardo Bussi.
Propone incendiar el Banco Central, demoler el Estado y gobernar para los que siempre le han pagado que son algunos empresarios. Está contra los partidos políticos y los políticos a los que denomina casta; Macri y Milei tienen, confesión de ambos, como autora preferida a Ayn Rand, rusa, nacionalizada norteamericana, muerta en1982, creadora de una corriente filosófica conocida como objetivismo, del cual han extraído algunas de estas “brillantes” ideas: “El altruismo es una teoría moral que predica que el hombre debe sacrificarse a sí mismo por otros, que debe poner el interés de otros por encima del suyo propio, que debe vivir por el bien de otros. El altruismo es una noción monstruosa, es la moralidad de caníbales, devorándose unos a otros. Es una teoría de profundo odio por el hombre, contra la razón, contra el logro, contra cualquier forma de éxito humano o felicidad en la tierra”. “A menos que logremos convencer a la gente que la justicia social es injusta, de que la redistribución de ingresos es inmoral y que la igualdad mediante la ley es contraria a la justicia, una sociedad libre será inviable”. Esto Javier Milei lo expresa así: “La “justicia social” es una idea propia de la barbarie que genera un desequilibrio fiscal monstruoso y deriva en mayor pobreza”. En el libre mercado se pueden vender órganos y bebes siempre que sea voluntariamente y a nadie en esas condiciones debe privarse del derecho de morirse de hambre
El libro “La Rebelión de Atlas” de Ayn Rand fue durante años el libro de cabecera de Mauricio Macri que regalaba a sus amigos junto a “La virtud del egoísmo” y “El manantial” de la misma autora.
Es fácil entender porque atrae tanto a Macri y Milei “La Rebelión de Atlas”: “Divide a la sociedad estadounidense en dos clases: la de los «saqueadores» y la de los «no saqueadores». Los «saqueadores» están representados por la clase política (místicos del músculo) y los cultos religiosos (místicos del espíritu) que piensan que toda actividad económica debe estar regulada y sometida a una fuerte imposición fiscal. Los «no saqueadores» son hombres emprendedores, los capitanes de empresa y los intelectuales que piensan que la solución está justamente en todo lo contrario. Entre ellos, y más en concreto, de los patronos, surge un movimiento de protesta que se concreta en un lock out acompañado de sabotajes y desapariciones misteriosas de empresarios y emprendedores.
El líder de este movimiento es un misterioso personaje llamado John Galt, a la vez un filósofo y científico. Galt, desde su escondite en las Montañas Rocosas, da órdenes, sugiere iniciativas y mueve todos los hilos. Junto con él, se refugian los principales empresarios e intelectuales del país. Durante el tiempo que dura el lock out y la desaparición de los empresarios, el sistema estadounidense se va hundiendo bajo el peso del cada vez más opresivo intervencionismo estatal. La novela termina cuando los empresarios deciden abandonar su escondite y marchan a los centros de decisión económicos, encabezados por el dólar, símbolo que Galt ha elegido como estandarte de su particular rebelión.”
Las siempre falibles encuestas le dan a La Libertad Avanza un 20% a nivel nacional. Su ataque a los partidos políticos no es original en el país. “El 3 de enero de 1965, en el acto de lanzamiento del Partido Cívico Independiente, Álvaro Alsogaray dijo que los partidos políticos eran los factores determinantes de los males que aquejaban al país”, Pablo Gerchunoff “El planisferio invertido”. página 63.
OPERACIÓN LULA
Mientras muchos jueces perciben como altamente probable el triunfo de la oposición y sobreactúan el apoyo al macrismo, que obstaculiza la posibilidad de determinar quién está detrás del intento de magnicidio reduciéndolo a “tres loquitos marginales”, se marcha decididamente en el juicio de Obras Públicas, mediáticamente de un sesgamiento pocas veces visto, a condenar a la vicepresidente Cristina Fernández a 12 años de prisión e inhabilitación de por vida a ejercer cargos públicos. El objetivo es sacarla de la cancha electoral mientras se intentan reabrir juicios que parecían cerrados. Es la operación Lula que permitió la elección de Jair Bolsonaro en 2018 y la imposibilidad de Lula de presentarse.
EL GOBIERNO NO HACE GOLES NI CON EL ARCO LIBRE
Alberto Fernández evita el conflicto con el poder económico, mientras que los promueve hacia el interior del Frente. Se niega a una mesa de acuerdos entre los tres referentes, al tiempo que cuando finalizan las concesiones menemistas no se anima a hacer un gol con el arco libre que recupere el optimismo y la épica. Es el caso de la mal llamada Hidrovía con lo que se denomina el Río Paraná que está extranjerizado. Escribió Mempo Giardinelli: «Extranjerizado» significa que no solamente la operatividad del río pasó a internacionalizarse, sino que se expulsó a Argentina de sus costas, que hoy pertenecen a puertos extranjeros. No hay administración argentina, las banderas son extranjeras, lo cual también es agraviante para la población. Además, es sabido que el Estado argentino no tiene control sobre los miles de barcos que entran y salen. Esos barcos no pagan impuestos, ni siquiera se pesan sus mercaderías. La decisión de privatizar el río la tomó el gobierno argentino de Menem, y se realizó de manera irregular. Cuando se establece lo que se llama la «hidrovía”, o «vía navegable”, -todos sustitutos del nombre del Río Paraná- se estaba entregando una concesión operativa, según el decreto original, pero sin más precisiones. A partir de ahí, los concesionarios se apoderaron del río Paraná, es decir, la concesión se convirtió en una privatización. En los años 90 hacer eso era casi una moda, no solo en Argentina, sino en toda América Latina, y en el mundo. Se desplazó abusivamente a todos los controles argentinos, a la Prefectura Naval Argentina, a la Policía, a la Dirección de Tránsito, y todo, también el uso de vías férreas quedó tercerizado en función del comercio exterior. Por desidia de más de un gobierno, el Estado no tiene el control. Pedimos la derogación del Decreto 949/20, firmado por Alberto Fernández, porque al vencerse la concesión que dio Menem, Fernández simplemente la renovó, e incluso agregó alguna ventaja para las compañías extranjeras, lo que nos indignó. Y a partir de allí empezó nuestra lucha. Hoy, la costa atlántica argentina está interrumpida porque el Canal Magdalena, un canal natural, no se mantiene, debido a la presión de las multinacionales. Todos los buques que bajan por el Paraná deben cruzar transversalmente el Río de la Plata y llegar hasta Montevideo, es decir, Argentina, en lo que a esto respecta, no tiene salida directa al mar. Por eso los productos salen por puertos extranjeros y eso hace que las compañías no paguen impuestos, lo cual es terrible para la economía argentina. Entonces, el Canal Magdalena es esencial. Posteriormente la resolución 625/2022 del Ministerio de Transporte firmado por el Ministro Alexis Guerrera y según la cual y de hecho se regala definitivamente el Río Paraná a las multinacionales”.
Lo mismo sucede con el Puerto de Quequén, uno de los mejores puertos, de gran profundidad, cuya concesión venció y se ha decidido privatizarlo por otros 25 años.
Sería importante que quede claro que sucederá con las nuevas Pampas Húmedas como son promocionadas Vaca Muerta y el Litio. ¿ Se aplicará aquí la teoría del derrame donde las sobras es lo que quedará para los argentinos?
El gobernador de Jujuy, el radical Gerardo Morales afirmó que el litio es “el eje central del crecimiento económico de la provincia y admitió que sólo el 5% de la producción está previsto que se destinen a proyectos de agregado de valor en el país y el resto tendrá como destino de exportación como mineral en bruto”.
EL PESIMISMO ESTÁ LLENO DE INCERTIDUMBRE
Deuda externa, el Plan del Fondo que Alberto Fernández ha dicho que es el plan del gobierno y que lo ha convertido en un presidente protocolar sin voluntad para torcer un horizonte que parece jugado, un primer ministro cuyo objetivo es que el gobierno llegue a concluir su mandato pidiéndole colaboración al establishment que siempre lo miró con simpatía, con pocas reservas en el Banco Central, una sensación de derrota en la cima del gobierno, una vicepresidente que encuentra el futuro en la finalización de su segundo mandato, tratando de saltear hasta en los discursos, la mínima inclusión en los 4 años del gobierno del que es parte, mientras el poder económico y sus medios la quieren presa, con una oposición que viene por todo para refundar la Argentina del primer centenario.
Cristina Fernández ha decidido ponerse al frente del Movimiento intentando integrar a todos los miembros actuales y potenciales del Frente de Todos. Eso lleva posiblemente, más allá de lo que le gustaría, a ser la candidata del espacio. Contra esa posibilidad se moviliza el Poder Judicial con sentencias desfavorables próximas.
Tal vez una oposición que se ve el 10 de diciembre del 2023 entrando en la Casa de Gobierno termine con sus propuestas que sin maquillaje resultan indigeribles, intimidando a los que hoy se proponen castigar una experiencia en gran parte fallida y decidan que el rechazo visceral a lo existente es infligirse un penoso autocastigo. La crisis de la Argentina supera largamente a las alternativas existentes en el 2022, y ahí está el meollo del descrédito en que está sumida la política
Es por eso que el pesimismo está lleno de incertidumbre. Tal vez porque la esperanza puede apoyarse precariamente, más vinculada a la fe que a la racionalidad, en una frase del dos veces presidente del Brasil Fernando Henrique Cardoso: “Cuando esperamos lo inevitable, ocurre lo inesperado”
Buenos Aires, 30 de Noviembre de 2022.
*Periodista. Co-conductor del programa radial EL TREN, con más de 19 años en el aire. Contador Público recibido en UBA. Fue profesor de Economía Política en la Facultad de Ciencias Económicas de la misma Universidad.
4 Comments
Como siempre tan claro Hugo Presman. Sus notas son imperdibles. Ojalá ocurra lo inesperado.
Gracias Hugo. Tus palabras no son estériles, deambulan y susurran a despertar. Ojalá ocurra lo esperado por los que creemos en una mirada colectiva de la vida.
Asi es Hugo, el pesimismo es una realidad a igual que el descalabro, espero que las alertas sirvan para crear conciencia de lo que vivimos.
Excelente análisis, lejano de los exegetas de Cambiemos y de Cristina. Ambos, con sus lógicas diferentes, tienen poco en común respecto a sus ideologías, pero sus egos compiten de igual a igual. Uno propone el segundo tiempo, otra un nuevo 17. Difícil prever el futro de nuestro País, con una mafia enquistada en todos los círculos de poder, con una dirigencia entre mediocre y corrupta, y un pobrerío precarizado y inutilizado en sus aspiraciones de una vida digna, por arrendatarios de sus calamidades. Tal ves, exista otro 17, pero de seguro no será con estos dirigentes apacibles y dialogadores con el círculo rojo y el FMI. Los pesimistas racionales, entre quienes me incluyo, solemos pasar por alto lo imprevisible, que como bien especula Hugo, nos puede llegar a dar una sorpresa de las buenas.