Alberto Nadra brinda un análisis cualitativo del ascenso de la resistencia de los trabajadores a las políticas de ajuste, reducción de salarios y despidos del gobierno libertario, con eje en la reducción del “costo laboral” vía techo a las paritarias y despidos masivos con fuerte impacto en la economía y la vida cotidiana. En su mayoría aisladas y atomizadas, con una dirigencia política que mayoritariamente mira para otro lado, el reclamo de unidad y articulación de las bases encuentra un primer cauce mediante el multisectorial «Frente de Lucha por la Soberanía, el Trabajo Digno y los Salarios Justos», que este miércoles 25 convoca a movilizarse.
Por Alberto Nadra*
(para La Tecl@ Eñe)
El gobierno fracasó en su intento por invisibilizar y, sobre todo, evitar la creciente generalización de la resistencia de los trabajadores a su ajuste antipopular y antinacional.
Frente a un gobierno empeñado en borrarlos del mapa, en las calles, fábricas y sindicatos respondieron con masividad y un programa claro: salarios que cubran la canasta básica y freno a los despidos masivos.
Mientras Milei celebra una inflación “en descenso”, del 25% interanual en pesos, la Canasta Básica supero el100% en el mismo período. Los salarios perdieron un 38% de su poder adquisitivo desde diciembre de 2023[1].
En mayo, las precursoras movilizaciones de los jubilados confluyeron con un aumento de las protestas obreras, con triunfos concretos: la ruptura del cepo “libertario” a las paritarias y la reincorporación de cesanteados, como los 300 trabajadores despedidos por la petrolera estadounidense Halliburton.
Se registraron alrededor de 225 acciones (más de 7 diarias), superando las cifras del mes anterior y las de mayo de 2024, según el Observatorio de Trabajo y Derechos Humanos de la UBA, para el cual la curva de conflictos sigue en ascenso.
La resistencia, heterogénea y polifacética, incluye a nuevos actores como los gremios universitarios, colectivos o los clubes de fútbol. El movimiento sindical –con metalúrgicos, alimentación, viales, estatales de la sanidad, judiciales y docentes a la cabeza—lidera paros y movilizaciones nacionales. Geográficamente el AMBA predomina, seguida de la región Centro y de la Patagonia con similar número de conflictos[2].
“Reestructuración reaccionaria del capitalismo local”
Tal la caracterización del economista Julio Gambina[3], para el cual este proyecto busca un cambio estructural pues:
–Prioriza un país de servicios abierto al capital transnacional, profundizando el modelo agroexportador y abriendo el sector energético a inversiones externas.
–Potencia la producción primaria, hidrocarburos no convencionales y minería, para atraer capitales externos.
–Promueve un desarrollo empresarial orientado a servicios para inversores externos, con estabilización macroeconómica, seguridad jurídica e incentivos para grandes inversores.
–Disciplina al movimiento social y al empresariado local mediante represión y apertura de importaciones.
–Beneficia a capitales externos y grandes capitales locales asociados.
–Perjudica al empresariado local y a los trabajadores, con aumento del desempleo público y privado, y cierre de empresas incapaces de competir bajo el capitalismo de Milei
El cerco patronal-estatal
Los grandes grupos económicos —promotores y beneficiarios de las políticas de Milei, Sturzenegger y Caputo—desnudan su hipocresía libertaria al impulsar paritarias por debajo de la inflación, recortar el ‘costo laboral’ y precarizar el empleo. Lo logran mediante un cerco implacable:
1-Devaluación y ajuste fiscal, que encarecen la vida.
2- Desregulación laboral, que elimina derechos adquiridos y precariza el empleo.
3- Represión como política de Estado, para ahogar la protesta.
¿Cómo opera?
– Cesantías y superexplotación: Desde noviembre de 2023 a marzo de este año se destruyeron 210.971 empleos (130.102 públicos y 80.869 privados). Paralelamente, 13.862 empresas cerraron [CEPA, junio 2025] [4]. El costo laboral cayó a mínimos históricos [FIEL, 2024][5] , reflejando la superexplotación agudizada por el miedo al despido y la presión de un creciente ejército de desocupados.
– Ataque a los derechos laborales: Una clara tendencia es el despido de delegados sindicales, violando leyes que los amparan, por ejemplo la abogada y delegada de ATE en el Ministerio de Justicia, Flavia Fernández Brozzi[6]; representantes de Cancillería, la secretaría de Derechos Humanos, ANSES, INTA, ANAC, la TV Pública o el Hospital Posadas. Las patronales de Molinos Rio de la Plata, Ledesma, Metrovias, las del gremio del Neumático, Solbayres, Nittida o Secco siguieron eta línea.
Un caso que marca tendencia y decisión es el de Toyota, que en Zárate echó 700 trabajadores, incluyendo 63 de 70 delegados de SMATA. El criterio de despidos no fue aleatorio: primero se desvinculó a delegados gremiales, luego a sus colaboradores cercanos, y más tarde a operarios con alguna conexión sindical previa.
El Índice Global de Derechos 2025 (Confederación Sindical Internacional, CSI), ubica a la Argentina en el nivel 4 sobre 5, es decir el de una “violación sistemática de los derechos de los trabajadores”[7]. El Gobierno pretende empeorarlo mediante un achicamiento de los cuerpos de delegados gremiales en la administración pública nacional, con un “Registro Centralizado de Delegados Gremiales” y otro de “Juicios en los que se invoque Tutela Gremial”.
– Despliega una represión sistemática en movilizaciones, empresas y reparticiones. Pablo Grillo, fotoperiodista, se encuentra en compleja rehabilitación luego de tres meses en terapia intensiva, tras destrozarle el cráneo con una granada de gas. No es un hecho aislado: Amnistía Internacional registró 1.155 casos de agresiones a manifestantes en 2024-2025. Según la CTA Autónoma,250 fueron detenidos y Bullrich inició causas contra 171[8].
Resistencia y victorias
Pese al cerco patronal, los sindicatos lograron avances, demostrando que se puede romper el ajuste, revertir despidos y proteger derechos.
– Paritarias: STIA: 20% trimestral en Arcor y $40.000 no remunerativos (30.000 trabajadores) [Infobae, 2025]; UOM: 25% en Siderar y $35.000 fijos (50.000) [Mundo Gremial, 2025]; Camioneros: 27% con revisión (200.000) [Ámbito, 2025]; Aceiteros: 30% en Cargill y $50.000 de bono (20.000) [Página/12, 2025]; Bancaria: 22% con $77.031 de participación en las ganancias (100.000) [Ámbito, 2025]; Sanidad, $85.000 e incremento por sobre la inflación [Conciliación Obligatoria, junio 2025].
– Reincorporaciones: UOM, 35 trabajadores en Acindar [Mundo Gremial, mayo 2025]; FATSA: 50 trabajadores en clínicas de Córdoba [La Izquierda Diario, 2025]; SiPreBA: 70 en Télam tras fallos judiciales [Página/12, febrero 2025]; STIA: 20 en Molinos Río de la Plata [Infogremiales, mayo 2025]; CICOP: 15 en Hospital Posadas [Infogremiales, marzo 2025]; SECASFPI: 50 en ANSES tras un fallo judicial [Infogremiales, mayo 2025] APINTA: 25 trabajadores del INTA tras un paro y amparo judicial [Página/12, abril 2025].
Los límites de la resistencia
La dirigencia política del movimiento nacional y popular brinda cotidianamente descripciones, caracterizaciones y hasta pronósticos acerca de esta ofensiva que castiga a la mayoría de los argentinos, pero parece no registrar la resistencia que se despliega, dispersa, atomizada y ocultada por el bloque dominante y sus medios. Es dolorosamente manifiesta su ausencia para contribuir a la articulación de estas luchas y darles un horizonte político.
La dirigencia sindical tradicional, esencialmente negociadora según Eduardo Lucita, hoy “se encuentra sin instancias de negociación porque bajo el gobierno de Milei el Estado no intenta arbitrar entre las clases, sino que inclina permanentemente la cancha a favor de las patronales. Por lo que la CGT una y otra vez, muy a su pesar, está obligada a salir al ruedo”[9]. Esto explica los picos y baches de la resistencia a la política antiobrera.
Un camino alternativo, que recoge una probada tradición organizativa del movimiento popular argentino lo ofrece el nacimiento de una multisectorial para enfrentar el ajuste de Milei. Conformado por gremios del transporte, las CTA, sindicatos combativos y organizaciones sociales, el «Frente de Lucha por la Soberanía, el Trabajo Digno y los Salarios Justos», una suerte de recreación del MTA (Movimiento de los Trabajadores Argentinos) de los años 90, en paralelo a la CGT y con un espectro todavía más amplio de representación. Su primer desafío: una movilización convocada para el 25 de junio frente al Ministerio de Desregulación.
Hay un término técnico que el oficialismo subestimó: la elasticidad. Por más que intenten doblar la vara de los salarios, la resistencia de los trabajadores ya no se pliega. Es la dignidad que estalla en fábricas, rutas y plazas, que late bajo los overoles de los metalúrgicos, las batas de los hospitales públicos y los chalecos de los estatales
La multisectorial emergente, con sus contradicciones y potencialidades, no es aún la respuesta, pero sí un síntoma de que la bronca dispersa busca –y puede encontrar—un cauce común. La resistencia obrera, tosca pero indomable, es la columna vertebral de un futuro sin ajuste.
Referencias:
[1] INDEC (2025). Índice de Precios al Consumidor (IPC) – Mayo 2025. Buenos Aires: Instituto Nacional de Estadística y Censos. Disponible en: https://www.indec.gob.ar/indec/web/Nivel4-Tema-3-5-31) y CTA Autónoma (2025). Informe SEL: Evolución del salario real frente a la Canasta Básica (Diciembre 2023 – Mayo (2025). Buenos Aires: Central de Trabajadores Argentinos. Disponible en (https://www.cta.org.ar/observatorio-salarial). Datos cruzados con CEPA e IARAF.
[2] “Observatorio de Trabajo y Derechos Humanos, UBA, Boletín de Conflictividad Laboral, mayo 2025, en https://huelladelsur.ar/autor/daniel-cieza-y-santiago-parrilla/
[3] El Blog de Julio C. Gambina, Milei es un proyecto político de reestructuración reaccionaria del capitalismo local, en http://juliogambina.blogspot.com/2025/06/milei-es-un-proyecto-politico-de.html
[4] CEPA, Análisis de la dinámica laboral y empresarial, en https://mcusercontent.com/e9c6f62a4dc825f6a9dab4e88/files/4f882ab9-6efc-cd3c-f393-09beefcf02d2/An_aacute_lisis_de_la_din_aacute_mica_laboral_y_empresarial_CEPA_Datos_Marzo_2025.pdf
[5] “FIEL, Informe de Costo Laboral, 2024, citado en Línea Sindical https://www.lineasindical.com.ar/salimos-baratos-fundacion-fiel-reconoce-costo-laboral-bajo-decadas-n-1749395.html
[6] “Infogremiales, ‘El Gobierno despidió a una abogada de Derechos Humanos’, 12 de junio de 2025, https://www.infogremiales.com.ar/el-gobierno-despidio-a-una-abogada-de-derechos-humanos-querellante-en-crimenes-de-lesa-humanidad-y-ate-habla-de-persecucion-a-las-politicas/”.
[7] CSI, Índice Global de Derechos 2025, https://www.ituc-csi.org/ituc-global-rights-index-2025-ES?lang=en
[8] CTA Autónoma, ‘El primer año del gobierno de Javier Milei’, diciembre de 2024, https://ctaa.org.ar/el-primer-ano-del-gobierno-de-javier-milei-ajuste-represion-y-resistencia-popular/
[9] Lucita, E., El ascenso de la conflictividad social Huella del Sur, 15 de junio de 2025 https://huelladelsur.ar/2025/06/15/el-ascenso-de-la-conflictividad-social/
Buenos Aires, 24 de junio de 2025.
*Político, escritor y periodista.