Vivir en el conurbano bonaerense es un verdadero infierno, con millones de personas cercadas únicamente por la muerte y muchas otras desventuras. Eso es al menos lo que publican en conjunto Clarín, La Nación e Infobae, según un estudio realizado por la consultora Argumentaria. Casi nunca sucede allí algo bueno, salvo en el conurbano norte. Surge también una caracterización directa de la presencia de toda clase de peligros allí donde vive la población más empobrecida.
Por Argumentaria Consultora*
(para La Tecl@ Eñe)
El conurbano bonaerense aparece como un lugar maldito, en el que la vida es prácticamente inviable, según el menú noticioso que eligen cada día Clarín, La Nación e Infobae, medios en los que ocho de cada diez informaciones son rotundamente negativas, vinculadas en proporciones muy significativas con la muerte, asesinatos y otros crímenes.
Terror, atrocidad, horror, salvaje, salvajismo, barbarie y muerte son palabras usadas en los títulos para introducir a acontecimientos en el conurbano, un territorio en el que, según estos medios, muy excepcionalmente ocurre algo positivo o alentador, algo que sea bueno para el diario vivir.
Estas son las evidencias principales que surgen del registro diario de las noticias de Clarín y La Nación, en sus versiones impresas y digitales, y de Infobae, hecho en el trimestre marzo-abril-mayo. El estudio, realizado por Argumentaria Consultora, permite ver, entre otros aspectos, que apenas una de cada treinta noticias pueden ser consideradas positivas o alentadoras.
La supremacía abrumadora de las noticias referidas a peligros para la vida y, por lo común -vinculado a lo anterior- para la propiedad privada, es muy potente durante el trimestre, a pesar de que progresivamente, y sobre todo en mayo, comenzaron a ocupar más espacio las informaciones referidas a los procesos electorales y, en especial, las internas del peronismo y del espacio de la derecha, conformado principalmente por el PRO y La Libertad Avanza. Estas menciones políticas del conurbano o Gran Buenos Aires, y/o de las intendencias que integran la región, son en gran parte por la participación de sus autoridades o representantes en actividades y reuniones referidas a la disputa electoral. Es decir, tampoco aportan información específica de lo que acontece en esos distritos.
Las noticias que se presentan con los términos más alarmantes o conmocionantes para el público, como muerte y asesinato, homicidio, tiroteos, los hechos rotulados como salvajes, los que causan terror, los que son sangrientos, rozan el 40 por ciento de las informaciones publicadas.
Pero además hay una presencia intensa de otros acontecimientos igualmente negativos, como acciones delictivas y riñas violentas entre habitantes, así como incendios, inundaciones y catástrofes en el tránsito.
Hay varias noticias que se refieren a más de una intendencia o incluso a más de una región del conurbano, por lo que las clasificamos como “multizona”. Pero en la mención específica de municipios, la porción más significativa en las oleadas de noticias negativas está destinada a La Matanza. Esto se debe en gran parte a las informaciones sobre hechos delictivos, pero hay una parte que tiene también sesgo negativo porque se dedica a las causas judiciales emprendidas contra dirigentes peronistas del distrito.
Clarín, La Nación e Infobae publicaron 519 enunciados informativos sobre el conurbano. Solo 16 fueron clasificados como «hechos positivos». Una cobertura casi irrisoria de buenas noticias: 3,1%. Dentro de ese grupo tan magro, Vicente López recibió la gracia de quedarse con un tercio de las noticias, mientras otro tercio recayó en proyectos de emprendimientos inmobiliarios o complejos edilicios con promesa de ciertos beneficios.
En este total de 519 informaciones, Axel Kicillof apareció una vez en todo el trimestre con la inauguración de una obra en Almirante Brown, aunque la crónica de Clarín puso énfasis en que realizó esa acción al mismo tiempo que Cristina Fernández de Kirchner realizaba un acto en el que, se supone, el gobernador debía estar presente.
Es cierto que cada uno de los títulos, crónicas, fotografías y videos se corresponden con hechos efectivamente ocurridos, así como lo es que las coberturas nunca se detienen en las acciones que el Estado tenga en ejecución para enfrentar una situación tan compleja. Es decir, en una descripción según la cual la violencia y el peligro son constantes, no aparecen autoridades con sus acciones, sean buenas, regulares o malas, sean suficientes o insuficientes. Subyace, entonces, una descripción casi directa de una población completamente desamparada, abandonada a su mala suerte, y para la cual es virtualmente imposible imaginar su supervivencia cotidiana.
Asimismo, la atención a los hechos más violentos se enfoca especialmente en las zonas y barrios populares, en particular los del sur del Gran Buenos Aires, lo que expresa una estigmatización de la pobreza.
Como se observa en los gráficos[1] , una sección o categoría significativa es la que denominamos coyuntura política, pero tampoco en este segmento hay signos alentadores para la población: las crónicas solo se dedican a enumerar, en el peronismo provincial y los partidos de derecha que se le oponen, cómo se ubican algunos de los actores, con qué sector se alinean, a qué lugar aspiran en las listas. Si nos guiamos por este conjunto de informaciones, diríamos que esta dirigencia no tiene propósito ni plan alguno para mejorar la vida de sus comunidades. O nos quedaremos pensando en que, al menos, jamás hablan de ello. Este aspecto puede resultar un insumo interesante para responder a las preguntas frecuentes sobre la apatía o desconfianza de una parte grande de la población con “la política”. También puede ser tomado en cuenta por quienes creen que esa apatía se debe exclusivamente a los contenidos de las “redes sociales”, dado que los medios tradicionales siguen siendo el instrumento con el que, al menos una parte de las audiencias, cree encontrar información completa y verificada.
En este sentido, será interesante observar la evolución de las tendencias informativas en el trimestre en curso (junio, julio, agosto), dado el avance del calendario electoral y el acercamiento de la primera cita en las urnas, en septiembre. Por lo mismo, será oportuno observar la publicación de noticias sobre hechos delictivos, la denominada inseguridad, puesto que es un tema recurrente en las campañas y en los medios que asumen papeles muy activos en ellas.
Enlace al estudio completo: https://drive.google.com/file/d/1Z_2rwCZqFuAj5nu5EBcSiguDL8XAxG4q/view?usp=sharing
Sitio web: argumentaria.com.ar
Buenos Aires, 30 de junio de 2025.
*Hugo Muleiro, Natalia Rossetti y Magalí Gómez.