El sociólogo y analista político Artemio López, sostiene que El Frente de Todos se encamina a ganar las elecciones de medio mandato, rompiendo la tradición de derrotas vigente para el peronismo desde el año 2005.
Por Artemio López*
(para La Tecl@ Eñe)
El Frente de Todos se encamina a ganar las elecciones de medio mandato, rompiendo la tradición de derrotas vigente para el peronismo – en el gobierno o la oposición – desde el año 2005, cuando ocurrió el triunfo de CFK sobre Chiche Duhalde en Provincia de Buenos Aires por más de 20 puntos y eso constituyó el plexo del triunfo nacional del entonces FPV.
Nada fue fácil en las elecciones intermedias desde entonces para el peronismo gobernante u opositor. Se sucedieron las derrotas de los años 2009, 2013, e incluso el triunfo del neoliberalismo en el año 2017.
Primer gran atributo de este triunfo del año 2021 del Frente de Todos, interrumpir un ciclo de más de una década de derrotas sucesivas del peronismo en elecciones legislativas.
La construcción del triunfo del FDT en las elecciones PASO y generales tendrá epicentro en Buenos Aires, provincia que representa el 38% del padrón nacional y será el motor de la ventaja nacional, junto a la mayoría de las provincias del NEA y NOA.
Contrario sensu, CABA, Santa Fe, Córdoba y Mendoza, distritos que sumados representan el 32% del padrón nacional, serán escenarios de derrota para el actual oficialismo, como viene aconteciendo hace mucho tiempo.
Sin embargo, una nota a considerar en la elección de CABA es la irrupción de Javier Milei que según la mayoría de las encuestas capta hoy casi el 8% de los votos, provenientes en un 90% del voto joven y duro del oficialismo porteño, que no parece haber acertado en la elección de candidatos ni en la estrategia de armonía “supra grieta” que de hecho ahora mismo están revisando.
En efecto, la huidiza María Eugenia Vidal está muy lejos de ser la candidata imaginada por los estrategas de la fuerza neoliberal porteña y hoy recepta apenas el 30% de los votos, en una interna que se completa con Ricardo López Murphy que toma 10% de preferencias y el ex secretario Adolfo Rubinstein que suma 2%.
Como se ve, la fuerza oficialista no llega a 45% de los votos sumados todos sus componentes, lo que ya por si solo supone la peor elección de los últimos años
Motivo por el cual, la dinámica electoral del distrito porteño podrá verse alterada notablemente.
La aparición de un opositor como Leandro Santoro, figura joven y de prestigio que suma votos por fuera de la marca FDT, resulta un dato muy importante a tener en cuenta para imaginar los resultados de las PASO.
De hecho, hoy como candidato individual, Santoro perfora el techo de los 30 puntos y encabeza las preferencias en las primarias con el 32% de los votos por sobre María Eugenia Vidal.
Por primera vez un opositor al oficialismo porteño encabeza las preferencias en las Primarias Abiertas Simultáneas y Obligatorias.
Un interrogante que se abre ya de cara a noviembre es el que se plantea en el caso de que Javier Gerardo Milei se consolide como tercera fuerza electoral en torno a los 8 o 10 puntos: ¿qué pasará con el flujo de votos entre libertarios y oficialismo?
¿Reforzarán los votos de Milei en noviembre la opción que encabeza María Eugenia Vidal o contrario sensu serán los votos duros de la coalición oficialista porteña que hoy acompañan a López Murphy los que reforzarán la opción de Javier Milei, para convertirlo así en una opción distrital de derecha dura y capaz de competir a futuro con chances ejecutivas?
Lo sabremos el 14 de noviembre después de las 18 horas.
Buenos Aires, 31 de agosto de 2021.
*Sociólogo. Director Consultora Equis.